Tuesday, August 14, 2007

Confesion

Como me di cuenta de que este blog solamente lo leo yo, decidí que se convertirá en el lugar perfecto para decir todas aquellas cosas que uno siempre quiere decir, pero que rara vez se atreve a contar en voz alta. Eso si, espero no se convierta en uno de esos espacios en los que las personas nos cuentan que amanecieron tristes, las mujeres nos cuentan que la mensualidad les pego duro, que peliaron con el novio y muchas cosas que realmente al resto de los 6.000´000.000 de habitantes del planeta (a excepción del novio) muy poco les importa. Claro esta que mis confesiones nunca llegarán a ser tan impactantes como las de Virginia Vallejo, pero siento que encontré este espacio para contar mi primera gran verdad: No tengo Celular. y de esta gran verdad se deriva la que sigue: No me importa ni me interesa tenerlo. Y no es que me haya convertido en uno de esos rebeldes que evitan un producto porque no van con el "capitalismo Salvaje", ni porque piense que todo tiempo pasado fue mejor, no, simplemente no me gusta. Aun creo que uno de los principales derechos del hombre es la libertad a perderse un rato, la libertad de preocupar a alguien un poco, no hay nada como poder tener de excusa la falta de un telefono cerca para no haber llamado. No existe nada mejor que haberse perdido de un delicioso sabado en la oficina porque no me pudieron encontrar. Además, el celular creo grandes contradicciones que nunca entenderé, como que la gente diga que el celular les sirve para mantenerse conectados, pero nadie tiene minutos para llamar cuando necesita. Bueno, esta fue la confesión de un "rebelde sin causa" que prefirio que no lo encontraran.

2 comments:

Victor said...

Escaparce un rato, como dicen por esta tierra del chontaduro A ROBAR AL LEY, si siempre que uno llama a la novia ella se lo pasa a uno.

JEJE Te queremos pez

Unknown said...

1. A Victor se le olvidó el idioma. eso pasa por irse al extranjero.

2. Yo me hago el de mercadeo y me vuelo a ''hacer investigación de mercados''.

Consejo: Las donas saben mejor a las 3.30PM cuando me las disfruto pensando en los idiotas de la oficina.